La devastación de París por las bombas y la ciencia alemana

Tras haber atacado Londres la aviación alemana decidió bombardear Paris el 31 de enero de 1918. Según las noticias transmitidas por el ejército francés cuatro escuadrillas de aviones alemanes se acercaron a la capital francesa por el lado nordeste arrojando gran cantidad de bombas que causaron 36 muertos y 190 heridos, según las primeras estimaciones de los daños causados por el raid aéreo.

La mayor parte de las víctimas fueron civiles, fundamentalmente mujeres y niños,  lo que soliviantó a la opinión pública aliadófila, como se aprecia en el testimonio que transmitió Manuel Machado  a sus lectores de El Liberal. En él se aprecia también su crítica a la deriva belicista de los científicos alemanes como ya expuse en mi trabajo «Movilizaciones y escisiones de la comunidad científica en tiempos de guerra» (accesible aquí).

Como era habitual las observaciones de Manuel Machado iban acompañadas de una viñeta de Ricardo Marín.

Jueves 31 enero 1918

Catorce mil kilos de dinamita, setecientas bombas sobre París. Niños, mujeres, enfermos y ancianos han fenecido bajo la lluvia de fuego…

Esto no es el arte de la guerra. Pero sí es la ciencia. La ciencia alemana, que contenía, sin duda, en los últimos capítulos de su programa este delicado experimento. La ciencia alemana, para quien la catedral de Reims es un estorbo cualquiera; la ciencia prusiana, para quien la bondad, la moral, los sentimientos humanos, la vida, en fin, caen por completo fuera del cubilete…La pobre ciencia, inocente y brutal, que, en su absurda soberbia, quiere enmendarle la plana a Dios mismo, y que caerá vencida por esos sentimientos a quienes afrenta, para servirles al fin de esclava y de auxiliar, como Dios manda.

Así lo ha dicho monseñor Omette, el cardenal-arzobispo de París, protestando del ominoso raid. ¡Y no estás solo, noble príncipe mártir. Contigo son en este momento todos los verdaderos cristianos del mundo!.

Ricardo Marin jueves 31 enero 1918

 

Los obreros alemanes antiimperialistas cantan La Marsellesa en enero 1918

A medida que la guerra se hacía más cruenta en el frente occidental las protestas crecían en el interior de las potencias centrales en los inicios de 1918. Manuel Machado, cuya aliadofilia se hacía cada vez más patente en su diario que publicaba en El Liberal, no desaprovechaba ocasión para criticar el militarismo y el imperialismo alemán, como hizo el 30 de enero de 1918 al contraponer los significados de La Marsellesa y el Deutschland über alles.

Sus reflexiones iban acompañadas de una ilustración de Ricardo Marín.

Miércoles 30 enero 1918

Llegan hasta nosotros los ecos de la Marsellesa. No se puede vivir entre dos Repúblicas…Pero el caso es que esta Marsellesa no se canta en Francia ni en Portugal. Viene nada menos que de Hamburgo y de Berlín. La entonan los obreros alemanes. Setecientos mil obreros alemanes en huelga contra los planes aniquiladores del imperialismo, del militarismo, del pangermanismo prusiano, han contestado al himno vernal y patriotero del Deutschland über alles con el generoso himno de fraternidad universal que es la Marsellesa.

¡Oh, Marsellesa, único canto de los hombres libres, que hace venir las lágrimas a los ojos de todo verdadero demócrata; Marsellesa, madre de nuestro espíritu liberado, eco de las grandes reivindicaciones humanas! ¡Cantar único del pueblo, que, cuando no te canta, no hace más que llorar!.

Ricardo Marín miércoles 30 enero 1918

Una denuncia de la agresividad del imperio alemán en la Gran Guerra

Numerosos estudios existen, como el de Jesús Perea Ruiz (ver aquí) acerca  de cómo afectó a la sociedad española la guerra submarina desencadenada por Alemania durante la Gran Guerra para cortar los abastecimientos a Inglaterra. Esa guerra se intensificó a princpios de 1918 con grandes perjuicios a la marina mercante española y a la población española que sufría serias carencias de productos de primera necesidad. La opinión pública aliadófila instaba al primer ministro García Prieto a poner coto a la agresividad alemana, y el gobierno hacía difíciles equilibrios para mantener la neutralidad en el conflicto bélico que desangraba a diversas partes del mundo, particularmente a Europa.

Manuel Machado, admirador de los sistemas políticos de los países aliados, muestra una vez más en su diario su aliadofilia al denunciar el torpedeamiento de los buques Victor Chavarri y Giralda por los submarinos alemanes. Una vez más sus reflexiones, vertidas en el diario El Liberal,  iban acompañadas de una ilustración de Ricardo Marín

 

Mundo Grafico El vapor Giralda 26 enero 1918Sábado 26 enero 1918

Empezó la semana con el torpedeamiento -siempre por los señores alemanes- del Victor Chavarri, que termina con el del Giralda; dos barcos españoles que traían subistencias o carbón a nuestros puertos. Ya nos vamos haciendo a estos accidentes. Ya esto no asombra aquí a nadie. Los únicos asombrados, pasmados, estupefactos de nuestra tranquila resignación, son los alemanes. Me consta de un modo positivo.

Cierta prensa germanófila -dedicada amablemente a dificultar nuestras relaciones comerciales, «únicas posibles» -, no habla para nada de estas cosas. En cambio, el supuesto fusilamiento de un español en la frontera francesa, ha ocupado sus columnas durante unos días…hasta que se ha sabido que el español Sr. Duñaveitia está sano y salvo, sin que nadie le haya causado el menor daño.

Esta feliz plancha no les servirá siquiera para pasar al otro lado de la cuestión y apiadarse sobre los náufragos de nuestros buques hundidos.

Ricardo Marin 26 enero 2018

 

El resquebrajamiento de la alianza de las potencias centrales en la gran guerra en enero de 1918

Atento al desarrollo de los acontecimientos bélicos que definían el contexto internacional de la sociedad española en los inicios de 1918 Manuel Machado, en las reflexiones siguientes, se mostró esperanzado ante las señales procedentes de Austria, donde crecían los sentimientos pacifistas. Numerosos indicios manifestaban el cansancio ante la guerra de la población austríaca. De esa situación informó a sus lectores de El Liberal, manifestando una vez más sus sentimientos aliadófilos, característicos de los liberales españoles en aquella coyuntura. Como casi siempre sus reflexiones iban acompañadas de una viñeta de Ricardo Marín.

Jueves 24 enero 1918

Austria quiere la paz. La quiere el pueblo y el Estado. Entre los centro-europeos, el Estado austríaco ha sido el primero en comprender que, si los pueblos se entienden, el mal será de momento para el Estado, aunque luego el estado de los pueblos sea lo que Dios quiera…Por su parte, Alemania habla también de paz…a su modo. Habla para que la oiga el país, harto de guerra, y atribuya a los demás el retraso de la paz, a reserva de ver si un buen golpe de mano en los campos de batalla aviva el espíritu nacional, y el entusiasmo por las viejas ideas imperialistas y pangermanistas acalla las voces del hambre y de la humanidad. Pero, en fin, la santa palabra está ya en el corazón de muchos y en boca de todos.

Ricardo Marin 24 enero 1918

El 12 de enero de 1918 en el dietario de Manuel Machado: expectación ante una nueva fase de la Gran Guerra

El año 1918 se inició con la implicación cada vez más amplia de Estados Unidos en la Gran Guerra que asolaba el mundo desde el trágico verano de 1914.

El Liberal de 12 de enero de 1918, por ejemplo, se hacía eco de una intervención del ministro de la Guerra norteamericano en el Senado de Estados Unidos en el que informó de la organización de la maquinaria bélica de su país que a finales de 1917 era capaz de movilizar a 1.428,000 militares.

Pero las reflexiones de Manuel Machado relacionadas con sus vivencias de ese día aludieron, como se verá a continuación, a dos importantes discursos dados días atrás por el primer ministro británico Lloyd George (n. 1863) y el presidente norteamericano Woodrow Wilson. (1856).

Wilson, en efecto, había pronunciado días antes, el 8 de enero de 1918, un importante discurso en el Congreso de Estados Unidos donde expuso 14 puntos con el objetivo de alcanzar la paz en la conflagración mundial en la que Estados Unidos acabaría implicándose a fondo, inclinando la balanza a favor de las potencias aliadas.

Como es sabido esos puntos, entre los que se encontraba la creación de una Liga o Sociedad de Naciones, antecedente de las Naciones Unidas, sirvieron de punto de partida para establecer el Tratado de Versalles de 1919.

Manuel Machado vio en los discursos de esos dos políticos un atisbo de paz en una conflagración que se vivía en la sociedad española con una gran intensidad, a pesar de ser neutral el Reino de España en la contienda mundial.

Estas son sus reflexiones, acompañadas como casi siempre, por la correspondiente ilustración de Ricardo Marín.

Sábado, 12 enero 1918

Antorchas de paz se encienden aquí y allá en estos últimos días. Lloyd George y Woodrow Wilson han empuñado las más fuertes y luminosas. El mundo entero -todo el mundo que no está ciego- las ha mirado a través de lágrimas de esperanza. Y un aura de paz como un suspiro ha dilatado los pechos.

¿Viene al fin la suspirada? Esperémosla silenciosos y devotos. Silenciosos, sobre todo.

Ricardo Marín 12 enero 1918

First World War online resources

Electronic Collection Management

To mark the centenary of Britain’s declaration of war with Germany at the start of the First World War we have put together a list of eresources that are available to members of the University of Cambridge, either via subscription or which are freely available online.

3042609649_faaac7e25e_o ‘The soldier & his horse (Chipilly) #3’ by jinterwas on Flickr

Cambridge University Library recently digitised the war diaries and journals of the poet Siegfried Sassoon and made them freely available online, here.

The digitised collection …

«…makes available online for the first time 23 of Sassoon’s journals from the years 1915-1927 and 1931-1932, and two poetry notebooks from 1916-1918 containing rough drafts and fair copies of his war poems. Unlike edited printed transcriptions, the digitisations allow the viewer to form a thorough sense of the nature of the physical documents.»

Members of the University of Cambridge can access the Adam Matthew resource The First World…

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Avances de la historia digital en Europa y América latina en la segunda quincena de mayo de 2015

Día a día surgen nuevas iniciativas en el campo de la historia digital. Continuando con el empeño en destacar quincenalmente -como ya hice en un post anterior (ver aquí)-, propuestas que me parecen de interés por diversos motivos, relacionados en gran medida con mi labor investigadora, destacaré en esta ocasión los siguientes proyectos, surgidos varios de ellos afortunadamente en el entorno digital ibero-americano.

Destacaré en primer lugar una magnífica iniciativa del Portal de Historia de la Fundación Mapfre que se suma a otras que ya ha puesto en marcha para potenciar la historia digital. En efecto quien visite ese portal puede: conocer la Colección América Latina en la Historia Contemporánea; hacer un seguimiento de un blog iniciado en diciembre de 2013; acceder a decenas de recursos archivísticos iberoamericanos; informarse de numerosos eventos a través de la sección noticias; y adentrarse en cuatro interesantes dossiers sobre: Clío digital, que contó con la participación, entre otros, del catedrático de la Universidad Carlos III Antonio Rodríguez de las Heras, uno de los pioneros de la historia digital en nuestro ámbito académico, quien realiza en ese dossier una reflexión interesante sobre La presentación del discurso histórico (ver aquí); Cine y revolución, coordinado por María Luisa Ortega;  Un poder llamado balón. Fútbol e historia en América latina y España, coordinado por Manuel Chust; y Las repercusiones de la Primera Guerra Mundial en la Península Ibérica y América Latina, coordinado por Javier Moreno Luzón.

La nueva iniciativa del Portal de Historia de la Fundación Mapfre a la que me refería líneas atrás es la creación en él del novedoso espacio Historia y fotografía en Iberoamérica. Visitándolo se podrá consultar toda la información de los proyectos expositivos y editoriales alentados por la Fundación desde el año 2010 y visualizar una selección de imágenes representativas para conocer la historia de los países iberoamericanos desde mediados del siglo XIX hasta la actualidad. Muy interesante al respecto es por ejemplo la galería de imágenes que nos muestra el portal sobre la relación entre arquitectura y modernidad a través de cines latinoamericanos construidos entre 1923 y 1967. A destacar también dentro de ese espacio dedicado a las fotografías históricas la sección fotografía de la semana.

Nariño Colombia

Autor anónimo. Escena de una excursión campestre en Nariño (Colombia), ca. 1928. Colección particular.

En la otra orilla del Atlántico, situándonos en el continente americano, hay que saludar algunas de las excelentes iniciativas que se están llevando a cabo en Brasil para potenciar la historia digital. En este caso presentaré la labor de dos instituciones modélicas en la preservación, estudio y exhibición en la Red del patrimonio cultural y científico brasileño.

La primera el es Museo imperial de Petrópolis que reúne cerca de trescientos mil items museológicos, archivísticos y bibliografícos sobre el Brasil del siglo XIX, principalmente del período de gobierno del segundo y último emperador Pedro II (1825-1891), un mecenas de las artes y de las ciencias, a quienes rindieron visita los integrantes de la expedición española Comisión Científica del Pacífico allá por 1862, como mostramos en sitio web que construimos hace años en el CSIC sobre esa aventura científica (ver aquí). Parte del acervo documental del Museo imperial de Petrópolis está digitalizado. Recientemente sus responsables están digitalizando el viaje que hizo el emperador D. Pedro II a Estados Unidos en 1876 para asistir, junto al presidente de Estados Unidos Ullysses Grant, a la inauguración de la exposición universal de Filadelfia, evento que ejerció una gran atracción entre las elites científico-latinoamericanas de aquella época como ya expuse hace años en un artículo (ver aquí).  Durante tres meses Pedro II, que llegó a Nueva York el 15 de abril de 1876, recorrió gran parte de los Estados Unidos como se puede ver en el siguiente mapa. A lo largo de su viaje escribió un diario que fue donado al Museu Imperial en 1948 por su bisnieto D. Pedro Gastao de Orléans e Bragança. Ahora el Museu Imperial nos permite seguir cada una de las etapas de ese viaje gracias a la digitalización del diario que va efectuando día a día.

Mapa que reconstruye el viaje de tres meses de Pedro II por los Estados Unidos en 1876

Mapa que reconstruye el viaje de tres meses de Pedro II por los Estados Unidos en 1876 efectuado por André Hansen

Otra institución brasileña que está efectuando una encomiable labor a favor de la historia digital es la Casa Oswaldo Cruz, que es la unidad técnico-científica de la Fundaçao Oswaldo Cruz de Río de Janeiro dedicada a la preservación de la memoria de la institución y a promover la investigación, la enseñanza, documentación y divulgación de la historia de la salud pública y de las ciencias biomédicas en el Brasil. A lo largo de su historia el antiguo Instituto Soroterápico Federal (actual Fiocruz) ha acumulado una larga e importante experiencia en el ámbito de las ciencias de la salud y dispone de un importante patrimonio cultural que empieza a ser digitalizado y dado a conocer en la Red.

Microscopio monocular Verick nº 7 utilizado por el joven Oswaldo Cruz durante su formación, entre 1893 y 1896. Foto Acervo COC

Microscopio monocular Verick nº 7 utilizado por el joven Oswaldo Cruz durante su formación, entre 1893 y 1896. Foto Acervo COC

Así desde el año 2013 se ha incrementado la política de hacer accesible a los internautas parte de su acervo arquitectónico, archivístico, bibliográfico y museológico. Por ejemplo si vamos a la pestaña Patrimonio cultural de su sitio web podemos acceder a parte de su patrimonio museológico que se inició en 1902 cuando el investigador Oswaldo Cruz  (1872-1917) asumió la dirección del Instituto Soroterápico Federal e inició la construcción de una serie de edificios para albergar los laboratorios de investigación y nuevas áreas de trabajo para producir sueros y vacunas.  Navegando por ese acervo se puede acceder a objetos personales y de trabajo de Oswaldo Cruz, a iconografía sobre el personaje, a objetos de los laboratorios y de los edificios del complejo biomédico, y a instrumentos de diversas especialidades médicas.

Si hacemos click en la pestaña de Información y Comunicación accederemos a una serie de interesantísimas bibliotecas virtuales dedicadas a los científicos Adolpho Lutz, Carlos Chagas, que contiene fuentes de información sobre su trayectoria, producción intelectual y la enfermedad de «Chagas» con bancos de imágenes e inventario de su fondo archivístico, y a la historia de la poliomelitis y la lucha emprendida para su erradicación en Brasil  y Perú. Todas estas bibliotecas virtuales forman parte de la magnífica Biblioteca Virtual en Salud para América Latina y el Caribe, ambiciosa iniciativa continental, que se coordina desde la Casa-Fundación Oswaldo Cruz de Río de Janeiro.

Dando nuevamente un salto a Europa hay que congratularse de una iniciativa del Parlamento Europeo en la que se ha reconocido la interesante labor a favor de la historia digital llevada a cabo por jóvenes universitarios. Se trata de la concesión del primer premio europeo Carlomagno de la juventud en la edición de este año a @RealTime WW1, un proyecto de estudiantes del Master de Historia Contemporánea de Europa de la Universidad de Luxemburgo, Desde principios de 2014 estos estudiantes están contando episodios de la  vida cotidiana durante la Primera Guerra Mundial a través de Twitter en la cuenta @RealTimeWW1  A día de hoy han elaborado 2.262 tuits con 1.356 fotografías y videos y tienen 9.516 seguidores.

Destacaré finalmente dos noticias colaterales al cuerpo de este post. La primera se refiere a que el tercer premio de la edición de este año de los premios europeos Carlomagno de la juventud se ha concedido al proyecto español Infoactualidad, periódico digital en el que han participado ciento cuarenta estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. Lo ha compartido con el proyecto austríaco Social Soccer CUP y el chipriota Entrepreneurship, the Solution against Unemployment. El segundo premio lo obtuvo el proyecto francés Fronterra-European (border) line project. La segunda noticia alude a la felicitación que he recibido del internauta José Fernández, documentalista y fotógrafo, especialista en nuevas tecnologías, por la realización de esta bitácora y de mi otro blog Jaeinnova. Gracias a que la Red nos ha puesto en contacto he podido conocer su magnífico sitio web ww.jose-fernandez.com., donde hay numerosa información de interés para los humanistas digitales. Sobre ese sitio web volveré en otras ocasiones.

Iniciativas de historia digital seleccionadas en la primera quincena de mayo 2015

Continuando con mis preocupaciones por la historia digital, sobre las que informé en una conferencia en Logroño el verano pasado (ver aquí), voy a dar cuenta en este post de tres iniciativas relacionadas con esa manera de hacer historia que me han llamado la atención, por diversos motivos, en mis recientes excursiones por la Red en general, y por la blogosfera en particular.

– En primer lugar quiero destacar las recientes aportaciones que efectúa Rebecca Onion (@rebeccaonion) en su blog The Vault de The Slate Magazine. En su última entrada Luminous Lantern Slides of Blackfeet Tipis on the Prairies of Montana in the Early 20th Century informa de un proyecto llevado a cabo por Yale’s Beinecke Rare Book & Manuscript Library.

McClintock, W., & McClintock, W. The country of the 'Blackfeet' Indians. A.

McClintock, W., & McClintock, W. The country of the ‘Blackfeet’ Indians. A.

En él se han digitalizado centenares de placas de linterna basadas en las fotografías hechas por Walter McClintock en el estado de Montana entre 1896 y 1914.  Nacido en Pittsburg McClintock se graduó en Yale en 1891 y en 1896 viajó a Montana como fotógrafo de una comisión científica que iba a estudiar sus bosques. Gracias a la amistad que trabó con varios nativos se le abrieron las puertas de la comunidad Blackfoot del noroeste de Montana. Convivió con ellos y logró hacer miles de fotografías de su modo de vida: su entorno, su cultura material y sus ceremonias. Sobre su vida, obra y legado editó en 2009 Steven L.Grafe un importante libro que reseñó la antropóloga Joanna Cohan Sherer (ver aquí)  Ahora tenemos acceso gracias a la mencionada iniciativa de la Universidad de Yale a favor de la historia digital a 1.143 placas de linterna coloreadas, que se pueden ver también en Flickr (aquí).

Siksika Indians

McClintock, Walter, and Walter McClintock. Bad Married. Bird Rattler. Big Spring. Bear Shoe, Died … 956.

– En segundo lugar he localizado la interesante labor que está llevando a cabo Amy Williams @a_williams06 para facilitar la tarea de los historiadores digitales. Con los recursos que ofrece Paper.Li ha creado el periódico mural Digital History donde reúne periódicamente valiosas informaciones sobre este novedoso campo de trabajo. Además impulsa el sitio web mylifehistory.com vinculado a la cuenta de twitter @MyLifeisHistory. En la sección Digital History de ese interesante sitio web su autora explica en la entrada HISTECH: PAPER.LI la potencialidad de paper.li para los historiadores digitales, y cuán fácil resulta su puesta a punto. Interesada por este recurso Amy Williams ha creado cinco periódicos digitales: el ya mencionado sobre historia digital, y otros cuatro: Archaelogy News, Richard III NewsMedieval History News .Archives in the News

Digital History Paper Li

– Finalmente quisiera resaltar una de las múltiples acciones llevadas a cabo por los historiadores digitales que se interesan por la Primera Guerra Mundial ahora que estoy inmerso en una breve investigación sobre Ciencia y Política en la Europa y en la España de 1915, que se publicará a lo largo de este año en la revista digital Ubi Sunt? impulsada por un colectivo entusiasta de estudiantes de la Universidad de Cádiz. Este trabajo me está permitiendo profundizar en cuestiones que ya abordé en mi trabajo publicado no hace mucho «Movilizaciones y escisiones de la comunidad científica en tiempos de guerra» (ver aquí). De los hallazgos de los últimos días destacaré el post de Erin Allen  publicado por el blog de la Library of Congress sobre el hundimiento del Lusitania, cuyo centenario hemos conmemorado el pasado 7 de mayo de 2015. En él, como esa sabido, hubo una víctima española: el cocinero sevillano José Ulgar, como han recordado, entre otros, la periodista Eva Díaz Pérez y el escritor Fernando Aramburu. En su post Erin Allen nos aproxima al impacto mundial que tuvo aquel hecho bélico, un hito en la guerra submarina, y nos ofrece numerosas fuentes hemerográficas e iconográficas relacionadas con aquel evento que tanta repercusión tuvo sobre la opinión pública norteamericana. Además nos informa de una valiosa compilación de colecciones digitales sobre la primera guerra mundial como la guía de materiales para la primera guerra mundial compilada por Kenneth Drexler, especialista de referencias digitales en la Library of Congress. Esta guía proporciona links a recursos que incluyen colecciones de fotografías, partituras musicales, emisiones radiofónicas, y más fuentes. Esta guía ha sido valorada también por otras instituciones como la Robbinnsville High School Media Center que ofrece también otra muy útil lista de recursos digitales sobre la Primera Guerra Mundial. (ver aquí).

Lusitania Publicidad

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